Una vez cocida la borraja, la batiremos junto con dos vasos de su caldo, la harina de arroz, los huevos, la gaseosa, una pizca de sal y una cucharada de aceite. Terminaremos haciendo con esta mezcla unas pequeñas tortitas en una sartén.
Salpimentamos los filetes de trucha, los pasamos por harina de arroz y freímos.
Cortamos los ajos, cebollas, puerros y zanahorias para pocharlos junto con el aceite. Después, añadiremos el vino y el vinagre y dejaremos al fuego unos 20 minutos.
Introduciremos los filetes de trucha y dejaremos cocinar unos 10 minutos rectificando de sal.
Una vez retirado del fuego, dejaremos reposar unas 12 horas mínimo.
Separaremos los filetes y los desmenuzaremos.
Con las verduras haremos una batida que nos servirá para unir tortita de pan de borraja y trocitos de trucha.
Para adornar nuestra tapa utilizaremos unas finas tiras de puerro en tempura de garbanzo.